En increíble el
desgobierno existente en la región Lima, Ricardo Chavarría no acierta ni una en
la designación de funcionarios de confianza, tal como sucede en la Red de Salud
de Huarochirí.
Si sacaron al ex
director por diversas irregularidades entre ellas, despedir a una médico por
hacer polladas, a la actual directora deberían sacarla ipso facto. Pues de
dejarla en el cargo solo demostraría conchabamiento y encubrimiento.
Una de las pocas
ambulancias de esta red de salud (Santa Eulalia), fue fotografiada estacionada
al costado de la cancha sintética de Livia.
Este vehículo
habría servido para trasladar a trabadores para jugar fulbito, función muy
distinta a trasladar enfermos por una emergencia. Pero eso no es todo, la
paciencia es nuestra mejor virtud.
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