El presidente Pedro Castillo estaría actuando con un ápice de responsabilidad y respeto al país si antes de que su gabinete acuda al Congreso a pedir el voto de confianza este 8 de marzo, decide mandar a su casa a cuatro de los ministros más impresentables que ha llevado a trabajar al Poder Ejecutivo, tres de ellos por imposición de Vladimir Cerrón, el corrupto socio político del profesor chotano que supuestamente no iba a ser ni portero en el régimen del lápiz.
Las tensiones se
verían aliviadas si el presidente Castillo decidiera hacer caso a la invocación
de la Defensoría del Pueblo y licencia, para empezar, al “milagrero” nombrado
ministro de Salud, Hernán Condori, quien quizá por ganarse algunos aplausos ya
está hablando de levantar en un 100 por ciento las restricciones de aforo
impuestas con motivo de la brutal pandemia que aún nos golpea. ¿Este señor
quiere una cuarta ola de contagios?
Más allá de las malas
decisiones que pueda tomar Condori, su sola presencia en el gabinete es una
falta de respeto a los más de 200 mil muertos por el COVID, a sus deudos y en
especial a los médicos de verdad que perdieron la vida mientras este caballero
recetaba “aguas arracimadas” quizá a cambio de un sencillo para su bolsillo.
Pero no es el único. Hay otros que hace rato deberían estar en su casa para no
enturbiar más la gestión de un país obligado a salir de una crisis histórica.
Me refiero a los
ministros de Justicia y Derechos Humanos, Ángel Yldefonso; el de Energía y
Minas, Carlos Palacios; ambos ahijados de Cerrón al igual que Condori; y
también el de Transportes y Comunicaciones, Juan Silva, jefe de la “agencia de
empleos” del partido de gobierno en que se ha convertido ese sector que maneja
varios millones de soles de presupuesto. Hay más en el gabinete que son unos
verdaderos impresentables, pero los cuatro mencionados son los peores.
El mandatario se ha
quejado de los cuestionamientos que hace el Congreso a sus ministros, pero ¿qué
quiere?, ¿que los aplaudan? Ni los socios de Juntos por el Perú han
comprometido su apoyo. El Poder Legislativo no debería dar el voto de confianza
al gabinete de Aníbal Torres si no sacan por lo menos a los cuatro mencionados,
con lo que se estaría haciendo un gran favor al país y al propio régimen. ¿O es
que las órdenes e imposiciones de Cerrón se cumplen sin dudas ni murmuraciones?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.