Es increíble la
desidia, el desinterés o la incapacidad de nuestros gobernantes, que designan a
gente sin experiencia en cargos tan estratégicos como es la dirección de un hospital.
Este es el caso del
hospital de Chancay, en donde el nuevo director naufraga sin saber qué hacer.
Su impericia, su mediocridad y su falta de experiencia le han hecho designar y
remover a personas comprometidas en denuncias en la gestión de Alvarado.
Pero no es solo
eso, sino que este importante hospital viene ocupando el PENÚLTIMO LUGAR en
gastos de ejecución de todas las FUENTES DE FINANCIAMIENTO, en comparación a
otras redes de salud u hospitales de la región. Es decir NO SABEN cómo gastar
el dinero que administran.
Este penúltimo
lugar no solo es una vergüenza por las urgentes necesidades de los enfermos y
usuarios, sino que solo supera a la DIRESA de su director jefe FÉLIX PALOMO,
otro inefable y mediocre personaje.
Lo mismo sucede en
la fuente de financiamiento de RECURSOS
ORDINARIOS, demostrando así que el novel director Lindón Trujillo es un inepto,
que no tiene la suficiente capacidad de dirigir un importante hospital,
quedándole el cargo demasiado grande.
Este penúltimo
lugar es la prueba palpable de la desastrosa gestión de Lindón Trujillo, Jaime Moreno,
Félix Palomo, y el líder de todos estos personajes: Nelson Chui, el jefe de LA FAMILIA. Regresamos con
más. Porque la paciencia es nuestra mejor virtud.
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