A pesar de las
múltiples necesidades en educación, salud y agricultura, son estos sectores en
donde el nivel del gasto de inversión registra el peor avance presupuestal en
toda la historia de los gobiernos regionales.
Por ejemplo en las
redes de salud de Barranca-Cajatambo, Chilca –Mala, Huarochirí y Huaral el
nivel de gasto llega al 0 %, a pesar de tener transferencia que bordean los 10
millones de soles.
Asimismo en la
Dirección Regional de Salud y educación, el panorama es el mismo con un 0, 3 y
0. 5 %, sin embargo los hospitales y postas médicas y muchos colegios dela
región se encuentran en una situación calamitosa.
En Agricultura la
situación del gasto presupuestal es simplemente un desastre, más preocupados en
observar las ‘obras por continuidad’ para presuntamente buscar la forma de
aprovechamiento económico, solo tienen el 0.8 % en este primer trimestre.
Es increíble como
se pierde esta oportunidad histórica de inversiones con una gestión desastrosa
y que se distrae en cualquier demagogia antes que en invertir el dinero del
estado en obras de saneamiento, electrificación, prevención y descolmatación y
sobre todo en salud y educación.
La permanencia en
los cargos de estos impresentables no duraría ni un solo minuto más si
tuviéramos un líder que no le tiemble la mano y con carácter, para erradicar al
corrupto y al incapaz. Frente a este panorama el futuro se ve muy incierto,
pues las dudas y las vacilaciones o pena que sientan por estos ineptos
perjudican al pueblo.
En lo que sí están
al día es en los gastos de altos sueldos de asesores, representación,
protocolo, prensa mermelera y pagos a empresas con obras inconclusas y
observadas de la gestión chuista. Así mientras en gastos de inversión no llegan
ni al 7 % en toda la región, en gastos del ‘amiguismo’ superan el 20 %.
Pero eso no es
todo, regresamos porque la paciencia es nuestra mejor virtud.
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