Acostumbrado a sus
poses extravagantes y en contra de los intereses de Huacho, el mediocre regidor
huachano Arturo Uribe se opuso a la compra de canastas navideñas para los
trabajadores de la municipalidad provincial.
Como dice el viejo
dicho que el ladrón piensa que todos son de su condición, este sujeto junto con
otros regidores interesados en el fracaso de Huacho, no tuvieron compasión en
evitar que los trabajadores de la comuna huachana obtuvieran una canasta navideña,
alegando que la compra se haga mediante licitación.
Olvidándose que en
la época de gestión municipal anterior y
en la que este despreciable sujeto también fuera regidor se hicieron compras
similares de forma directa, hoy acompañado de otros despreciables regidores
inhumanos se opusieron a la compra por desabastecimiento inminente debido a la cercanía
de las fiestas.
Para este regidor y
los que lo apoyan y que buscan el poder para usufructuarlo, los trabajadores no
deben de tener una canasta navideña, mientras que este que cobra suculentas
dietas sin trabajar se considera con todo el derecho de pasar unas buenas
fiestas con el dinero del pueblo.
Esta actitud no es oposición,
sino representan ser enemigos del pueblo y por supuesto de los trabajadores. Pero
ya lo estamos investigando a este regidor que se considera un icono de la
transparencia y moralidad.
HIJOS DE MALA MADRE TAMBIÉN SE OPONEN AL REPARTO DE
JUGUETES PARA LOS NIÑOS DE HUACHO
Las fiestas
navideñas son de alegría y compartir, en estas fechas la unión es una
constante, Miles de rostros sonrientes, una música bulliciosa y un no sé qué de
especial alegría nos va contagiando casi sin darnos cuenta en este mes navideño.
Pero desgraciadamente
también encontramos a hijos de mala madre, quienes vienen tratando de sabotear
la entrega de miles de juguetes para los niños de la provincia de Huaura por
parte del comité de damas de la municipalidad provincial huachana y en la que
el alcalde Santiago Cano visita personalmente los lugares más alejados de la ciudad
llevando alegría para los niños.
Y es que
seguramente estos desadaptados y resentidos sociales no han tenido jamás una
navidad o simplemente odian que los niños, nuestra razón de ser, tengan un
regalo que alegre sus corazones en estas fiestas.
Esas personas puede
que odien la Navidad porque constaten más que nunca su propia realidad y al no
aceptarla se revuelvan contra la alegría de los demás.
Por eso debemos
entender que su soledad y resentimiento social, los haya hecho no solo sub
normales y antisociales, sino hasta enemigos de los propios niños como sino hubieran
tenido niñez alguna.
Pues hay que ser
bien miserable como para ensuciar una campaña de regalos navideños para los
trabajadores municipales, así como para los niños, aunque lo único rescatable
es el esfuerzo del comité de damas y del propio alcalde provincial y algunos
regidores, que haciendo caso omiso a los enemigos del pueblo continúan infatigablemente
recorriendo los lugares más alejados de la provincia, aquellos parajes que
estos desadaptados y resentidos de la sociedad desprecian.
Aunque de todas
formas les deseamos una Feliz Navidad y un próspero año nuevo y ojala que esta fiestas logren hacer cambiar
sus sucios corazones, porque hasta los seres más aborrecibles pueden cambiar.
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