Es increíble cómo hasta la fecha Julio Castillo continua como director de la Dirección Regional de Agricultura, y solo un incapaz podría considerarlo como un funcionario eficiente, más aún con los escándalos que día a día suceden en esa entidad.
Y es que debido a los cuestionamientos casi nunca está en la DRAL, y al
parecer administra a esta entidad por control remoto y debido a ello algunos
trabajadores considerarían como un botín festinando componendas con ciertos
proveedores.
Ahora para evitar que su ausencia sea visible por los trabajadores,
habría ordenado tapiar la entrada principal de esa entidad con puertas y lunas
polarizadas, de tal manera que los trabajadores tienen que ingresar por la
entrada a la construcción del local institucional, que para variar ya lleva 4
años sin terminar.
Es más, el ing. residente y hasta el supervisor 'ya piensan jubilarse'
en la Dral y están felices que esta construcción demore más años. Lo cierto es
que los trabajadores diariamente exponen su integridad física para pasar entre
materiales de construcción, tablas y clavos, porque al director se le habría
ocurrido cerrar el acceso principal para ... su privacidad.
¿Con que presupuesto ha podido casi tapiar su bunker?, al parecer el
dinero vendría del área de maquinaria pesada, cuyo responsable hace tiempo
debió ser destituido por los continuos escándalos en la compra y distribución
de kits, combustibles, lubricantes, etc.; Pero eso no es todo, regresamos con
más de la DRAL, porque la paciencia es nuestra mejor virtud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.