Una reflexión sobre las siete
palabras contemplando a esta región y con ojos de periodista. Una reflexión
llena de sinceridad en este tiempo de Dios. Léelas puedes creer o no. Te
ayudarán a pensar sobre el sentido de tu vida. Según el cronista, Dios es experto
en ocultar las grandes verdades a los sabios y hacerlas claras y transparentes
a los humildes.
DREL,DRAL, DIRESA, UGELES Y OTROS…………………..
PRIMERA PALABRA ( Lucas 23,34)
:”Padre ,perdónales , porque no saben lo que hacen”.
El otro día escuchábamos las
despistadas declaraciones de algunos funcionarios del Gobierno Regional.
Increíblemente, estos, con gran cinismo se lavaban las manos como
Pilatos.
¿Merecen perdón Córdova, Dolorier o Poemape
u otros, a quienes no les importa mejorar la calidad de vida de los
vecinos de la región Lima, sino de las suyas propias?, ¿Realmente no saben lo
que hacen? ¿Merecen perdón Juan Carlos García, María Montoya, Eddie Jara,
Nelson Chui y tantos perversos?
¿Merecen perdón sus sicarios y
chaveteros que a fuerza de insulto pretenden amedrentarnos?, Con esa lógica
perversa disfrutan la existencia de un mayor número de incipientes e ignorantes
para seguir viviendo de la sangre ajena como las garrapatas. Quienes sólo miran
las jugosas ubres de las entidades que dirigen, sin importarles el resultado de
su trabajo. ¿Hasta cuándo seguiremos contemplando este festín?
Ya es hora de llamar a las cosas por
su nombre y pedir cuentas claras de sus labores, a los que calientan la
silla y se lavan las manos como Pilatos. Estos no saben lo que hacen, pero
estamos seguros ya se ganaron un ingrato recuerdo en la mente de los que
sufrimos su incapacidad.
SEGUNDA PALABRA (Lucas 23,43):
“Realmente te digo que hoy mismo estarás conmigo en el Paraíso”.
El dolor físico y la desolación del
alma son desgarradores. El dolor físico taladra los huesos, destroza los
nervios. Hace que nuestra existencia transcurra por nuestra mente como una
película que evoca los momentos felices. Pero hay un dolor del alma que hiere
más con un dolor insoportable e inhumano.
Es el dolor de los ancianos
olvidados, de los enfermos solitarios, de los niños abandonados, de las madres
de los comedores, de los vasos de leche. Dolor de los que deseamos el
desarrollo de la región, ¿Tienen ustedes idea del dolor que provocan las
costras de la ingratitud, la traición y la maldad?. Esa soledad de las abuelas
arrinconadas en la esquina del hogar porque son un estorbo para todos. Dolor de
los hijos solos desatendidos por el compromiso social. Ese afán de ser
tinieblas en el hogar pero iluminados candiles para la calle.
Dolor de los disminuidos físicos y
sensoriales abandonados en su propia soledad. Hay una felicidad que viene para
todos en el paraíso. El paraíso de los sinceros es la risa alegre y la
felicidad. La infelicidad de los truhanes es el temor de que su dinero
mal habido les sea arrebatado en cualquier momento. La verdadera
felicidad no es esquiva y está presente en la sabia simplicidad de los
detalles. Dios hizo enredadas las grandes verdades a los sabios y transparentes
como el agua para los humildes. ¿Lo sabrán los incapaces funcionarios y su
sequito de irrecuperables y lumpenescos sujetos que los idolatran por un
plato de lentejas?
CADA DIA MÁS JODIDOS--------------
TERCERA PALABRA ( Juan 19,26-27):
“Mujer ,ahí tienes a tu hijo”, dijo al discípulo: “Ahí tienes a tu madre”
Saben ustedes que por consecuencia
del soterrado silencio a cada minuto se maltrata a un vecino. Hoy estos
son juez y parte, mandan y comandan, y si alguien se opone a punta de insultos
pretenden ocultar la mediocridad que los viste y calza. ¿Creen que nos
asustan?. Tenemos el alma fuerte y los nervios de acero.
Vivir en la región Lima es una
actitud heroica porque hay que soportar la discriminación odiosa de los que mal
gobiernan, pues no son capaces de destituir a quienes se apoderan de nuestros
escasos recursos y los reparten como monedas de plata de Judas y fariseos.
¿Cómo dicen que aman a sus hijos? Si no somos capaces de defender este
terruño y sacar a patadas a estos sinvergüenzas y a sus acólitos perversos.
Te haz puesto a pensar en aquellas
mujeres que lloran por que sus maridos no tienen trabajo, porque los
pocos que hay se los llevan los preferidos (as), sinvergüenzas de cuello
y corbata protegidos por malos funcionarios ávidos de chupar sangre, sabiendo
que en cualquier momento serán desaforados, pero como garrapatas chuparan
hasta la última sangre. En aquellas que se rebuscan la vida en condiciones
infrahumanas por culpa de estos incompetentes que no son capaces de generar
empleo en la región.
CUARTA PALABRA (Mateo 27,46): “Elí,
Elí, lamá sabactani”. Lo que quiere decir: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me haz
abandonado?”
Señor estaremos abandonados por
aquellos a quienes elegimos para la conducción de las Municipalidades, del
Gobierno Regional, y de la administración de la justicia. Realmente
vivimos un abandono cruel y despiadado. ¿Se darán cuenta nuestros gobernantes
de lo mal que hacen las cosas?. Nos quedamos sin palabras cuando comparamos las
gestiones de alcaldes de Huarochirí, Huaral y Canta, con algunos como
Huacho o Barranca. Los segundos están bien, los otros están mal. Nos
hemos acostumbrado al maltrato, y a vivir como si fuéramos ciudadanos de
tercera o de cuarta categoría y esto no es así.
¿Es justo que un alcalde (Eddie Jara)
en vez de velar por la moral y la ética,
autorice el funcionamiento de un burdel de degradación y perversión como en
Hualmay?
Vivimos rodeados de males sin
solución. Nos abandonaron también los líderes políticos de la región que viven
de espaldas a los urgentes problemas de los pueblos a quienes solo visitan en
campaña electoral. Y de los corruptos regidores de algunas
municipalidades, que cobran dieta puntual. ¿Son dignos a los ojos de Dios
los que cobran sin trabajar?. ¿Calentar la silla y levantar el brazo será un menester
humano?. ¿Les pediremos cuenta por lo mal que nos tratan?.
Estamos abandonados y sin ningún
“Chapulín Colorado” que les abra la conciencia a quienes estan dados al
facilismo, al floro y a la irresponsabilidad. ¿Hasta cuándo? ¿Hasta cuándo las
escuelas públicas abandonadas o las sillas y mesas que regalan se desarmen a
las dos semanas ?. ¿Hasta cuando los huecos y el polvo en las calles?,
¿Hasta cuando el abandonado de los mercados? ¿Hasta cuándo la odiosa
opulencia de estos gobernantes tan descascarados? …..
QUINTA PALABRA ( Juan 19,38-29): “
Tengo Sed”
Tienen sed los pobladores de la
región Lima. Tienen sed los pobladores de los CCPP y anexos, de las provincias
y distritos. Tienen sed los escolares de las escuelas públicas, en donde no hay
agua potable ni para remedio. Tienen sed los que no pueden reclamar.
Tienen sed de gobernantes dignos, los
olvidados de siempre, que son estafados por municipalidades ilegales, que les
cobran o les roban su poco dinero. Tienen sed de buenos regidores que no se
vendan por un sencillo. Tienen sed los padres responsables que desean una
verdadera revolución educativa. Tienen sed de periodistas valerosos como
nosotros que denunciamos a todo aquello que va mal en esta región, por
irresponsabilidad de los gobernantes. Tienen sed de predicadores que arrastren
con su ejemplo las almas. Tienen sed de amor los niños. Tienen sed de justicia
los olvidados.
Tienen sed de verdad los engañados.
Tienen sed de dignidad los que creen que las cosas no van a cambiar. Tienen sed
de salud los enfermos del alma por culpa de ineficaces e inhumanos
funcionarios. Tienen sed de respeto y transparencia en el manejo del dinero de
todos nosotros. Tienen sed de verdad y alegría los niños. Todos tenemos sed de
Dios.
SEXTA PALABRA ( Juan 19,23-30): “
Todo está cumplido”.
Se cumplió todo con el señor. Nuestra
vida tiene dos caminos el hacer el bien o el hacer el mal. Tú decides porque
eres libre. Finalmente cosecharás lo que siembres. Después no te quejes si tu
sementera no da frutos. La matemática de la vida es una ciencia exacta y estas
a punto de empezar todos los días un camino nuevo. En donde puedes sumar bien o
males. Así que prepárate mal gobernante, porque cosecharas tempestades
La felicidad se regocija en el bien.
La infelicidad se deleita en el mal, el egoísmo, el odio y la envidia. Se puede
ser feliz con un centavo e infeliz con una fortuna que satisface tus caprichos.
Recuerda siempre que el poder les fue entregado un día no por sus nombres, o
tus sensaciones de capacidad, sino porque todos creyeron que ustedes, podían
multiplicar la felicidad y se equivocaron. Así como mencionaron sus nombres,
mañana lo olvidarán y ante tu recuerdo dirán con amargura. No merecen ni que lo
nombren. No merecen siquiera que los respeten. Cambien en esta semana de
reflexión.
Entiendan que no pueden engañar a
todos. No pueden engañarse a sí mismo. La mentira es como el moho que les cubre
la piel y no se quita ni con el jabón más fino. Pueden decirnos que son
católicos, o que son agnósticos. No importa. Sin embargo, no pueden olvidarse
que se van a morir, algún día. No se entristezcan. Otros más altaneros que
ustedes se fueron camino al cementerio. Al menos limpien su alma,
cambiando de actitud.
SEPTIMA PALABRA (Lucas 23,48):
“Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”. Y cuando hubo dicho esto, expiró.
Hay quienes se empecinan en amasar
fortuna y poder desenfrenadamente. Se olvidan que este disfrute dura una nada,
porque todo se acaba con la muerte. Con dinero, con el oro, con poder, con todo
el deseo del mundo no se puede comprar la vida. La muerte irremediable arrasa
con todo. Sólo nos consuela la fe en la vida eterna. No te aferres las cosas
detenidas si todo está en movimiento y cuando somos cadáveres quedamos
transformados en la triste condición de ser carne para los gusanos. Este es un
paso transitorio en donde por la ley de la gravedad todo lo que era hermoso y
turgente se descuelga. Todo se arruga y es una pasión de tontos ocultar lo que
es inocultable. Sepan los que gobiernan, que el poder es efímero y transitorio.
No existe sino el poder eterno de Dios que todo lo ve, que todo lo sabe. Y que
penetra nuestros corazones. A él no puedes ocultarte lo que escondes a los
humanos ojos. El estuvo antes que ti y estará después de ti. Cuando tu nombre
sea una simple palabra escrita en una tumba de cementerio. Y cuando la
indiferencia de todos no se detenga ante tu postrera morada. Si no quieres
destituir al corrupto, en corrupto te conviertes.
POR ULTIMO:
Esperemos con tranquilidad ese
encuentro en el que tendremos que rendir cuentas por lo que hicimos y lo que
dejamos de hacer. Hombres y mujeres santos recomendaban vivir cada día como si
fuera el último. Esta discreta cuenta te pone frente a los ojos de Dios cada
día. Descubrirán que está tan cerca y no se habían dado cuenta. Aun pueden
salvarse, los malos cristianos que los acompañan, no son buenos amigos, ellos
tienen el alma sucia y aunque traten de disimular, están llenos de dolo y
asquerosidad. Amén.
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