Y no les falta
razón, pues el gobernador regional Nelson Chui abandonó a Cañete en estos 4
años, desconociendo hasta la fecha las razones para ese desprecio; y es que en
estos 4 años ni siquiera pudo culminar con la construcción del Hospital de
Cañete, a pesar de haber transferido en tiempo record a la empresa CONSORCIO
CAÑETE más de 140 millones de soles.
LIMA
SUR EN EL OLVIDO
No hay obras de
agua, alcantarillado, pistas y veredas, electrificación, lozas deportivas, etc;
y lo peor a la Unidad Ejecutora Lima Sur la convirtió en una simple oficina de
tramite documentario con una excesiva burocracia con tal de favorecer a sus
amigos y cómplices Luis Custodio Calderón y Victo Mancini Echevarría.
Los escándalos en
las redes de salud y ugel, fueron también pan del cada día, con un gobernante
sin autoridad, miedoso y sobre todo incapaz. Por esta razón los cañetanos no
desean un nuevo Gobernador Regional del Norte Chico, sintiendo vergüenza ajena
por la desastrosa labor en contra de Cañete por culpa de Nelson Chui y su banda
de impresentables funcionarios.
CHUI Y
EL CONTINUISMO
Este justo
resentimiento no hace más que polarizar nuestras diferencias, y esa negativa
electoral para creer en una representante del norte es exclusivamente
responsabilidad de Chui, quien ahora pide públicamente votar por un HUARALINO.
Y es que Chui no
tiene sangre en la cara, pues luego de despreciar el progreso y desarrollo de
Cañete, y de ignorarlos como parte de la región Lima por 4 años, quiera imponer
sus preferencias electorales para favorecer a su socio político Ricardo
Chavarría.
LLEGÓ
EL MOMENTO DE CAÑETE
Cañete ya no quiere
pequeñas obras, ni regalos de mallas o tanques de plástico, este pueblo quiere
igualdad de oportunidades presupuestales, y aunque suene irónico por pertenecer
al Norte, consideramos que están en su legítimo derecho.
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