La pasión en
campañas electorales, hace a veces desborde y se difunden mentiras o medias verdades
por todo medio posible, no debería ser así; aunque es relativamente general y
hasta cierto grado repetitivo, tenemos: infiltrados, trolls, cuentas truchas,
medios desnivelados, agentes de contraataque, sabuesos rentados que siguen
específicamente la actividad de ciertos personajes o las cuentas de estos,
malos comunicadores o periodistas que solo atacan el honor del candidato, equipos
que destruyen publicidad del adversario o que pintan o pegan encima, etc., todo
en el ámbito regional, generalmente focalizado en un distrito o una provincia,
exceptuando por supuesto los infundios a través de las redes sociales que por
su naturaleza son globales; todo esto ya es conocido y se ha vivido en otras
campañas.
Lo que acontece en
esta oportunidad, no se había visto antes en nuestra región (aunque Montesinos
y últimamente Orellana y Benedicto con la revista “Juez Justo”, hicieron algo
similar); existe una increíble sofisticación en la guerra sucia, que mueve
necesariamente ingentes cantidades de dinero y busca ser muy subliminal; se los
voy a narrar: el martes 11 de noviembre en RPP conjuntamente con Transparencia
y PNUD, se lleva a cabo un debate entre los candidatos a segunda vuelta de
nuestra región, ese mismo día aparece en un importante diario de circulación nacional
una nota sobre un proceso que “abriría” (así en condicional) la Fiscalía contra
Nelson Chui, denuncia de un ciudadano limeño ex trabajador del actual gobierno
regional, en un distrito de Lima, ¿casualidad, o argumento para el rival?,
justo el tercer punto del debate, en RPP, sobre corrupción, no se
llevó a cabo por falta de tiempo; sin embargo inmediatamente llega la
invitación para una supuesta entrevista de descargo; pero oh! sorpresa, no
había tal entrevista, era un debate que tenía todo organizado y al otro candidato
bien acomodado; reclamamos a Transparencia y fui testigo presencial de la
exasperación del editor, cuando no caímos en el juego; finalmente y a
regañadientes aceptaron brindar el derecho a réplica, que no publicaron sino … hasta
el día viernes 21, si amigos, el mismo día que otro medio impreso de
circulación nacional (afín al primero), formula en primera plana y con las
páginas 2 y 3 a full, escandalosa, pero endeble acusación, desmentida
claramente; ¿otra coincidencia, otra casualidad?, me advirtieron de dicha publicación
a las 6 y 30am, busqué un ejemplar puesto x puesto, desde San Borja hasta el
Callao, donde pude conseguir uno finalmente, no habían disponibles, todos
habían sido enviados … ¡a la región!, centenares de miles de soles en impresos,
que pudieron tener mejor uso.
Los autores de estos hechos, saben perfectamente
que no va a tener ninguna repercusión de tipo penal; lo queevidentemente han
buscado es una caja de resonancia y fabricar argumentos, falaces por cierto; con
inteligencia maligna y sin escatimar recursos, para que luego reboten en redes
o en los medios locales; hablamos de medios nacionales con cierto prestigio y
posicionamiento, no es de ninguna manera barato utilizarlos en provecho propio,
le consulté a un amigo experto, cuyo nombre he comprometido no revelar, y me
dijo que todo este coordinado, sofisticado y subliminal ataque no costaría
menos de un millón de soles…¿de dónde pecata mía, sino es de la Sacristía?
Estamos advertidos
de esta nueva guerra sucia, cuyos capítulos finales están aún por venir.
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