La DIRESA dejó sin efecto la resolución N° 812-2014, el
contrato de 18 de 44 trabajadores contratados bajo la Ley 276 para el año
lectivo 2015 y que les daba un trato permanente con la entidad. Para tal fin se
emitió la resolución N° 144-DG-OEGDRRHH-DIRESA de fecha 13 de febrero del 2015,
firmada por el Director Félix Palomo Luyo.
Pero nos preguntamos, ¿Con que criterio técnico legal se
les renueva ese contrato a solo algunos
y se deja sin efecto a 18 de ellos?. Pues si aducen que dicho concurso fue ilegal
se debió dejar sin efecto a todos y no solo a 18 o en su defecto si desgraciadamente
se habían hecho de forma correcta este concurso todos debían seguir laborando en
el 2015.
Este concurso toril fue bastante criticado pues se hizo
ad portas de la salida de Javier Alvarado y era a todas luces la forma de
lograr la permanencia de sus allegados, de allí que de los concursante más del
70 % eran para plazas administrativas.
Revisando la Ley 276 Ley de Bases de la Carrera Administrativa y su reglamento aprobado con el DS
005-90-PCM, no encontramos en ninguna parte de la misma, argumento alguno para renovar solo a
algunos de los supuestos ganadores del concurso del TORO.
Esta discriminación seria incentivada por malos elementos
del sindicato de trabajadores, quienes son en el fondo los que manejan la
DIRESA, así como casi todos los hospitales de la región, en donde una cúpula de
burócratas amparados en el sindicalismo imponen directores y fuerzan a ellos
bajo amenazas, a cumplir sus deseos y caprichos, con la amenaza de paros y
denuncias.
No solo eso, además se benefician de los pagos por
diferenciadas, SUB CAFAE, viáticos y comisiones; y ocupan bajo presión los
cargos estratégicos que les permiten el manejo administrativo y presupuestal de
la institución, gozando además de licencias sindicales que les permiten ganar
sin trabajar.
Y es que en la DIRESA como en casi todas las redes de salud,
han contratado a jefes de personal y asesores legales que desconocen
completamente las normas, salvo honrosas excepciones y que con sus errores
permiten que muchos actos ilegales, se vuelvan lícitos ante el Poder Judicial.
Este importante sector, es prueba en la que la incapacidad
de los que la dirigen, permite que la impunidad
continúe reinando a través de sindicatos chantajistas, que extorsionan a
los directores para colocar en puestos claves a sus amigos (as), concubinas, amantes
y familiares, actitudes ilegales muy alejadas del noble servicio del sector
salud.
Hace unos días un Director hizo un papelón al presentarse
totalmente borracho a una reunión en la que se hizo gala del desconocimiento de
las políticas de salud, convirtiendo a este importante sector en un club de amigos
sedientos de saquearlo. Regresamos.
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