El
último accidente en la provincia de Cajatambo que costara 19 víctimas inocentes
y más de 15 personas heridas, alguna de ellas de gravedad, sirvió para desnudar
las falencias y los actos de corrupción en el hospital de Barranca.
Hospital en UCI
Sin
medicamentos, sin médicos anestesiólogos, sin equipos médicos y lo que es peor
siquiera sin sogas, camillas, vendas y hasta gasas, los heridos tuvieron que
ser trasladados al hospital regional de Huacho, ante la imposibilidad de ser atendidos
de urgencia en el nosocomio de Barranca y ni hablar de las postas médicas y
centros de salud de Cajatambo, en la que el personal para los primeros auxilios
brillaron por su ausencia.
Sin
rumbo ni capitán, este hospital navega en medio de cuidados intensivos, siendo
sus últimos alientos esquilmados por los que increíblemente hace un mes ya han
renunciado. Efectivamente tanto los médicos Ramírez, Landecho y Flores Malqui,
ya deberían estar fuera de la dirección y administración y por supuesto su cúpula
culpable de la crisis institucional.
Sin
embargo estos sujetos siguen haciendo de las suyas, aprovechando la complicidad
del guachimán de la DIRESA Henry Lobato, quien hace rato debió ser destituido
por las consecuencias del maltrato a las personas heridas del accidente en
Cajatambo, y quien hasta la fecha es incapaz de hacer los cambios, preocupándose
mas en bien hacer lobby para colocar aun
medico íntimo de Cesar Álvarez.
Por
ello bajo la complicidad de Lobato, estos sujetos que hace rato ya renunciaron
siguen firmando órdenes de pago para sus amigos proveedores, entre los que se
encuentran aquellos que realizan la labor de impresión y banners. Es decir en
este hospital no se pagan los salarios hace 4 meses al personal de la 99, no
hay medicinas ni equipos médicos, menos contratan anestesiólogos ni especialistas,
pero si festinan la plata del hospital en pagos a proveedores por presuntos
trabajos fantasmas.
Estrategias sanitarias: guarida de
compras inservibles
Las
encargadas de las estrategias sanitarias como si el hospital fuera su chacra,
siguen comprando a sus amigos proveedores gaseosas, papel higiénico, impresiones, frugos y otros, atendidos rápidamente por administración,
logística y contabilidad quienes se encargan de pagar de inmediato a esos proveedores.
Estos
trabajadores al igual que en la DIRESA y en todos los hospitales de la región,
hacen su agosto comprando cosas innecesarias para un nosocomio, como gorritos,
polos, volantes, libritos, agendas y tantas coas inservibles para mejorar el
sector salud. Bastaría hacer una inspecciona
estas áreas para ver tantas chucherías y golosinas, que solo sirven para
engordar las cuentas de estas personas.
Lobato peor que Gary Poemape
Mientras
Henry Lobato siga deshojando margaritas para tomar el control del Hospital de
Barranca, el saqueo continuo implacablemente. Los que ya RENUNCIARON no se van,
más bien siguen como si nada. Que desgracia para Barranca. Lobato es peor que
Poemape. Regresamos con más escándalos de la gestion del guachimán de la DIRESA.
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